Jornada contra Denia, un equipo al que nos enfrentábamos por primera vez esta temporada.
Salimos al campo con el objetivo de mejorar la ocupación de espacios, la toma de decisiones de cara al aro, el aspecto del rebote y una defensa que no deje jugar cómodas a las rivales. A lo largo del encuentro se pueden ver plasmados en la pista esos objetivos. Intentamos correr hacia delante de manera organizada, y encontramos canastas fáciles. Es en el momento en el que perdemos esa organización cuando erramos en la toma de decisiones. Pasamos a compañeras que no me están pidiendo el balón o voy botando por bandas, ayudando a las contrarias a sacarme de la pista e impedirme el pase.
En cuanto a la defensa conseguimos tener una intensidad que incomoda a las visitantes para hacer su juego, pero en ocasiones nos cuesta recuperar la posición defensiva cuando somos rebasadas por la jugadora con balón. En el rebote encontramos una mejoría respecto a encuentros anteriores, pero nos sigue faltando jugar con más contacto antes de ir a por el balón. A pesar de que en la segunda parte nos relajamos un poco a nivel defensivos seguimos manteniendo nuestro juego ofensivo encontrando aro de manera cómoda.
Tenemos que ser capaces de seguir con la misma intensidad durante todo el encuentro para aprovechar todos los minutos para seguir mejorando.
Por: Nerea Fernandez
