
Salida muy relajada de los nuestros frente a un equipo que desde el primer segundo supo poner dificultades a nuestro ataque y aprovechar muy bien las salidas a la contra.
Nos costó encontrar nuestro sitio en defensa, única vía para encontrar nuestro ritmo en el ataque. Pero a partir del segundo cuarto nuestra posición, carácter y ganas cambiaron. Fuimos capaces de recuperar varios balones que posibilitaban salidas a la contra fructíferas. Esto nos llevaba a las primeras ventajas a nuestro favor.
A partir de aquí, nunca con buen juego, pero si con mayor talento, físico y velocidad fuimos llevándonos un partido que nos debe enseñar muchas cosas. Cualquier rival es peligroso, cualquier equipo puede ganar y nuestro peor enemigo siempre será la relajación.
Seguimos avanzando.
Por: José Manuel Muñoz