Primera derrota de la temporada frente a un rival directo.
La presión por la victoria, que nos hubiera prácticamente asegurado una de las dos primeras plazas, nos pasó factura y el equipo acuso los nervios lo que hizo que perdiéramos infinidad de balones. Fallos debajo del aro, mal balance defensivo, tiros libres errados…
En definitiva un mal partido que nos costó la derrota y lo peor la perdida del baskeaverag.
Esta vez fueron mejores que nosotros pero en nuestra mano está la clasificación.
Por: Jose Luis Lillo