Nueva victoria que nos permite seguir líderes en solitario en un día de muchas emociones y aprendizaje.
Queda claro que el rival ha venido motivado y quería la victoria por todos los medios, nosotros sin embargo con más miedo a perder que ilusión por ganar hemos salido a pista una velocidad por debajo de lo debido.
A pesar de esto en el segundo octavo hemos empezado a engrasar un juego ofensivo eficaz que nos ha dado las primeras rentas y que después del descanso hemos conseguido incrementar hasta los 12 puntos.
Pero había que controlar los nervios y esto lo hemos llevado regular, además la defensa zonal rival nos ha paralizado en los últimos minutos y a pesar de que en ningún momento hemos ido por detrás ha hecho que hasta el ultimo segundo el partido pudiera caer para cualquier lado.
No debemos cambiar nuestro ADN ante la presión y a pesar de mostrar mejoría en la gestión emocional nos queda mucho camino por delante.
Por: Jorge García