El pasado viernes por fin estrenamos para un partido, el nuevo pabellón de San Vicente. Para ello, recibimos la visita de las chicas del CB Onil. Como era de esperar, se notaba la emoción por el estreno. De manera que, durante el calentamiento y los momentos previos al partido, se notaba en el ambiente los nervios lógicos ante dicho acontecimientos.
El inicio del encuentro estuvo marcado por ese mismo aura, las ganas de agradar provocaba que abusasemos del bote. Como buscando resolver las situaciones de ataque cada una por su cuenta. Esto provocó que las visitantes tomarán la delantera en el marcador durante estos primeros minutos.
Tras el paso por el banco, y tras aclarar algunos conceptos, comenzamos el segundo parcial mucho más concentradas. Haciendo que nuestra defensa se impusiese, ahora sí, a las acciones ofensivas de las chicas de Onil.
A partir de este momento, las Sanvicenteras consiguieron llevar la iniciativa durante el resto del encuentro.
Durante muchos minutos pudimos disfrutar de un juego ofensivo muy alegre y atrevido, en el que cualquier jugadora tomaba la decisión de tirar o buscar penetraciones que rompían la defensa visitante. Consiguiendo poco a poco y no sin esfuerzo, una ventaja por encima de los veinte puntos a poco más de diez minutos para la finalización del choque.
A partir de aquí, las chicas de Onil continuaron presentando batalla, sin perderle nunca la cara al encuentro hasta el pitido final.
Para finalizar, cabe destacar la actitud de las Sanvicenteras, que supieron controlar el partido sin dejar de jugar con atrevimiento en ningún momento del mismo.
Por: Joaquín Pérez
