Penúltima jornada del grupo ante un rival conocido, el equipo de Mutxamel.
El partido comenzaba con un gran ataque moviendo muy bien el balón para encontrar la mejor opción de finalización en todo momento. La defensa, no era tan buena como en otras ocasiones, pero conseguíamos compensarla con rotaciones, cambios defensivos y ayudas. Se llegaba al descanso con 20 puntos de diferencia, 9-29.
Tras el descanso, hubo unos primeros minutos de relajación e indecisiones que hizo cabrear al entrenador visitante e incluso pedir un tiempo muerto, pero tras esto, el equipo volvió a despertar y con grandes defensas y muy buenas transiciones y contraataques, abría más la brecha en el marcador, llegando al marcador final de 24-63.
Seguiremos puliendo esos fallos en ataque y defensa que a veces nos llevan a tomar malas decisiones en el campo.
1, 2, 3… Adesavi!
Por: Enrique Arcaina