Esta semana nos enfrentamos a un rival muy similar a nosotros.
Empezamos el partido con ganas de lucharlo y esas ganas no desaparecen en todo el partido. Además, damos una zancada enorme hacia la progresión que buscamos en todos los entrenamientos, lo que demuestra las ganas de aprender de estos peques y su constante esfuerzo durante la semana.
Al final, nos llevamos una merecida victoria de los nuestros, lo que les hace darse cuenta de lo que han evolucionado y de que ese espíritu guerrero de no perder la esperanza tiene una gran recompensa.
Pero sobre todo lo que es necesario destacar del partido es ese espíritu de equipo que se transmitió durante todo el partido a través de la animación del banquillo a los compañeros que estaban en pista.
Por: Zaira Zaplana
